BURGERHEIM: GHERY STYLE. LOGROÑO

Si tuviera que elegir una disciplina artística en el marco del arte contemporáneo con las que yo identificaría Logroño, y que me perdonen los de la Escuela de Artes, elegiría el de la cocina.

No apostaría por invertir en un museo para cuadros o esculturas, porque para esto tenemos aquí cerca el Guggenheim de Bilbao. 

Nosotros somos más de Burgenheim que de Guggenheim. De esculturas de carne y hueso, de composiciones y collage de olores, colores y sabores que permitan su posterior ingesta.

Si además de comer uno puede sumergirse en el mundo cultural, pues mucho mejor. Y eso es justo lo que permite este local. Comer una hamburguesa Frida Kalho, sobre un mantel de Wharhol, una Cezanne o una Murakami sobre un mantel de Picasso, o una Botero sobre un adaptado Dalí. Una forma de acercar a muchos al Reina Sofía (El museo, digo)

Toda esta decoración no es un escaparate para el despiste. Las hamburguesas son también hamburguesas gourmet. Y la carta invita al desarrollo artístico personal, porque cada uno es libre de seleccionar los ingredientes de su hamburguesa: Diferentes tipos de pan, distintas carnes seleccionadas de vaca, potro, wagyu, black angus, pollo o cordero, hasta 8 tipos de queso y otros tantos ingredientes. Sobre una oferta de composiciones propuestas, claro.

A la vista de mi hamburguesa, una Modigliani, un pelin tematizada por mi, cualquiera diría que mi vena artística es cuando menos escasa. La foto es triste, lo admito, pero a la vaca le sobraba hasta el pan. Estaba sinceramente buena.



No hace falta que yo opine bien del lugar, porque la aceptación del publico le avala. Que lleno esta siempre oye.

 

Nota: Para acompañar estas carnes, mejor con vino que con refresco, aconsejo. Y poco mas.

BURGERHEIM
Victor Pradera, 5
Logroño
Facebook